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claves expresar emociones

6 claves para expresar emociones y sentimientos

“La gente olvida lo que dices, la gente olvida lo que haces, pero nunca olvida cómo le haces sentir”.  Maya Angelou (poetisa y novelista estadounidense).

Las emociones nos indican qué personas, situaciones o cosas nos agradan o desagradan. Influyen poderosamente en nuestras creencias, pensamientos o en la forma de tomar decisiones. Y, por supuesto, cumplen una función fundamental en nuestras relaciones sociales ya que nos aportan información muy valiosa que debemos saber interpretar y gestionar adecuadamente.

Nos hablan de:

• Alegría: mensaje para iniciar o continuar la interacción.
• Enfado: efectuar un cambio en la conducta del otro.
• Tristeza: incitar el apoyo y la comprensión.
• Asco: evitar la continuidad de la interacción.
• Sorpresa: informar de nuestro estado cognitivo.
• Miedo: informar de que necesitamos ayuda‐recursos.

¿Por qué es bueno expresar las emociones?

• Liberas la tensión.
• Estructuras y comprendes la emoción.
• Te separas de la emoción.
• Puedes recibir comprensión y apoyo de otros.
• Facilita la prevención y resolución de conflictos.
• Tomas consciencia de posibles distorsiones.
• Puedes conectar con tus necesidades.

Pero para expresar las emociones no todas las personas tienen la misma habilidad. En ocasiones influyen aspectos negativos como el miedo al rechazo, ridículo, creencias limitantes o irracionales. Las palabras y las formas que empleamos impactan en nuestras emociones y pueden llegar a perjudicarnos en casos como:

• Distorsiones: “es que siempre me…”, “nadie me…”, “todos me hacen sentir…”, “debería ser
• Autoculpabilizarse: “es todo por mi culpa…” o culpabilizar a otros.
• Expresiones vicimistas: “¿por qué me haces sufrir”, “no te importa lo que me pasa…”
• Atacar a los demás y descalificar: “eres un/a egoísta, sólo piensas en ti..”
• No poner nombre a tu emoción: “Me siento fatal”
• Descuidar tu comunicación no verbal: tono, volumen de voz, gestos…

Claves a tener en cuenta

Para una expresión sana y eficaz de nuestras emociones y sentimientos es recomendable:

1. Emitir mensajes en primera persona. “Yo me siento…”. Hablar de nosotros, de cómo nos afecta una situación, un mensaje sin opinar ni aconsejar como debería expresarse o sentirse el otro.
2. Cuidar la comunicación no verbal: tono, velocidad y volumen de voz, gestos,..Usarla de forma consciente. Representa entre un 60‐70% de nuestra cognición social. Las emociones se plasman en gestos muy concretos y nuestra postura corporal cuenta como nos sentimos.
3. El impacto del lenguaje. El poder de las palabras. Es una de las formas de expresión que más usamos y que más poder tienen en nuestras relaciones interpersonales. En muchas ocasiones el cambio de una sola palabra en el contexto de una frase puede cambiar el mapa de nuestra realidad.
4. Utilizar las preguntas. Sirven para involucrar a otros en el momento o en la situación, Abren nuevas posibilidades, permiten descubrir recursos y fomentan de la creatividad. Son una clave fundamental para una gestión de relaciones productiva.
5. Feedback constructivo. Es una habilidad que se puede entrenar. Ayuda al otro a conocer el impacto de su conducta, como es percibido por su entorno y que efecto tienen sus comportamientos. Bien utilizado, es una herramienta eficaz en la gestión de conflictos.
6. Asertividad. La conducta asertiva garantiza que la relación está basada en el respeto y la valoración de ambas partes. Construye relaciones con vínculos emocionales sanos.

Teniendo presente la frase de Maya Angelou con la que iniciaba el texto, me viene a la mente una ocasión en la que un antiguo compañero de trabajo me dijo que, cuando entrevistaba a un candidato en un proceso de selección, al finalizar la entrevista cogía un papel en blanco y escribía una frase que describía cómo se había sentido y qué emociones le habían quedado. A continuación, en el mismo papel, dibujaba lo primero que se le ocurriese. Luego lo guardaba con el currículum del candidato y otras anotaciones que había tomado en la entrevista.

No recuerdo que fue lo que le contesté cuando me lo contó. Pero sí que me dejó sorpresa e inquietud… Y entonces me fui a mi mesa, cogí un folio, escribí una frase, hice un dibujo,…

Dos años después lo grapé junto a su currículum.

 

Crédito de la foto: johnhain / Pixabay

 

 

Alberto Chouza

Gestión y captación del talento, desarrollo profesional, marca personal, inteligencia emocional, coaching, responsabilidad social corporativa o deporte son algunos de los ámbitos en los que me he ido especializando. Pero no, no soy un experto. Soy un aprendiz que se hace preguntas en un entorno que cambia muy rápido.